Misterio, mistagogía y mística: he aquí la fórmula definitiva de todaexperiencia religiosa. En la rica tradición de la Iglesia, esta seriecomienza con el «misterio» de Cristo, presente en las Escrituras y los sacramentos («mistagogía»), y se adentra en el misterio de Dios através de la luminosa tiniebla («mística»). Esta indagación en lasfuentes de la mística tiene en cuenta las principales tradicionesreligiosas de la humanidad, en particular el hinduismo. Varios de susintérpretes occidentales, entre los que descuella Jules Monchanin, han visto en el misterio trinitario el espacio compartido para acceder al misterio insondable de Dios.