El contenido analiza de forma sencilla, pero sin olvidar el rigor científico, la función de la adolescencia, las etapas del crecimiento y de la educación del adolescente, así como su vida familiar, de estudio y de ocio. Explica los nuevos comportamientos de los adolecentes, que no han sido uniformes en cada etapa histórica, en cada contexto social y en cada persona, exponiendo además, doce casos reales.
Frente a otras concepciones tradicionales, el autor nos presenta la adolescencia como una etapa no reducible a la maduración física de la pubertad. En ella se dan tanto cambios cuantitativos como cualitativos, relacionados con la maduración de la personalidad. Es una época de crisis pero no de tipo patológico, sino de crecimiento, de desarrollo personal y de adaptación progresiva a la vida adulta.
La transición entre edades propia de la adolescencia no significa que sea una etapa de trámite. La adolescencia es el proceso de hacerse mayor, de llegar a la autonomía responsable típica del adulto. Esa travesía del adolescente tiene carácter de aventura y debe aceptar los sucesivos retos del crecimiento psicológico que se presentan a lo largo del camino. De forma paralela los educadores deben tener una actitud abierta ante los cambios de esta etapa, viéndolos como un conjunto de retos educativos.
En el libro se analiza con rigor científico, pero de forma sencilla y clara, la función de la adolescencia en sus diferentes subetapas, explicadas a través de doce casos reales comentados por el autor. También se explica cómo tratar a un adolescente y cómo educarlo.