Todos los días, la princesa de la torre tomaba su libro, se asomaba a sus páginas sin palabras y esperaba la llegada del pájaro. Y entonces el pájaro le contaba sobre el rumor del viento, los colores del mar y los sonidos del bosque. Cuentan los viajeros que vieron alejarse a la princesa en una barca que remaba, lejos, allá, hacia el horizonte...