Jerome K. Jerome y su familia han decidido que quieren ser mejores personas y que para eso necesitan vivir en el campo, cerca de la naturaleza. Y como el propio Jerome ya ha visto como algunos de sus amigos languidecían miserablemente construyéndose casas nuevas, es mejor comprar una y reformarla. Esta novela transcurre durante ese breve espacio de tiempo de obras e incomodidades. Jerome y sus hijos toman contacto con el mundo rural y lo hacen de un modo cómico y filosófico. Sobre todo cómico.