Cuatro décadas después, la Transición continúa despertando el interés de distintos sectores de la sociedad española, tal y como podemos advertir en opiniones y debates que se reflejan en medios de comunicación y redes sociales, muchas veces alentados desde la disputa partidista. En el ámbito de la historiografía se ha ido consolidando la idea de que fue un proceso de cambio político, impulsado desde los movimientos sociales que terminaron encauzando los partidos y en el que hay que tener en cuenta las transformaciones socioeconómicas, el papel de la cultura y los medios de comunicación, así como las influencias que llegaban del exterior. Por tanto, la Transición necesita una aproximación desde diferentes perspectivas para poder alcanzar una explicación plena. Este libro se ocupa de la dimensión internacional del proceso y para ello cuenta con un destacado grupo de especialistas que, tras hacer un balance del estado de la cuestión, valoran el papel de los protagonistas en la acción política en el exterior, estudian las visiones que se tenían más allá de sus fronteras y analizan la influencia ejercida desde F