Robert E. Howard (1906 -1936) decidió desde joven convertirse en escritor profesional, y a ese empeño se dedicó en cuerpo y alma a lo largo de su breve carrera, enviando sus relatos a revistas pulp de la época, como Amazing Stories o la mítica Weird Tales. Pletórico de ideas, escribió docenas de relatos de terror, del oeste, históricos, de aventura, de misterio, de piratas... Pero Howard era un hombre de temperamento difícil y se quitó la vida a los treinta años. La fama de la que disfruta en la actualidad le llegó décadas después de su muerte, gracias a la reedición primero de los cuentos de «Conan», y después de otras series de espada y brujería.
La serie de «Solomon Kane» puede considerarse una confluencia de géneros como el histórico, la aventura, la narrativa de piratas, el folletín y el terror, en ocasiones de corte bastante gótico. Solomon Kane es un sombrío puritano en la Inglaterra de Isabel I –justiciero misterioso, solitario y de métodos expeditivos–, y a lo largo de un puñado de cuentos vive sus tenebrosas aventuras por Europa y África (un continente inexplorado, lleno de ciudades
perdidas, caníbales, y horrores sin cuento). Lo sobrenatural –desde espectros a razas vampíricas– no sólo está presente en estos relatos, sino que a menudo forma parte fundamental de sus tramas.
«Las extrañas aventuras de Solomon Kane» reúne todos los relatos de este personaje publicados por la revista Weird Tales en vida de Howard, respetando su escritura original y lejos de los «arreglos» que sufrieron en ediciones posteriores.
La edición se completa con “La sombra del buitre”, relato protagonizado por «Sonia la Roja», que se desarrolla en Viena, durante el sitio de Soliman el Magnífico.