Tras haber intentado la aventura en Roma, el héroe es repatriado a Camerún, su país natal. En busca de sentido, llevado por el amor de Sita, su abuela, se compromete con una asociación que pugna por evitar las salidas «hacia los cementerios de arena y de agua». En Marruecos, se encuentra con el padre Antonio, que acoge refugiados, e Imana, cuya mano no soltará jamás. Al ritmo de esta epopeya coral y luminosa, los itinerarios se enredan, los destinos se entremezclan, entre el África, madre fundamental y la Europa tierra de exilios. La voz y el fraseo únicos de Marc Alexandre Oho Bambe borran las fronteras entre novela, poesía y relato iniciático.