La vida se ha convertido en un anuncio sin solución de continuidad donde apenas quedan ya espacios disponibles, libres de humo.Una cajera de supermercado con vocación de astronauta. Un escritor que descubre su doppelgänger en un cirujano amarillo durante la visita nocturna a un acuario. Los salmonetes con cerezas que recuerda el niño que creció viendo el exótico y húmedo espectáculo de «La Negra» entrando en el Mediterráneo. La inspiradora historia de un churrero sin mano, mitad hombre, mitad robot. Las piernas de un escritor joven que nunca llegarán a la presentación de su prometedora novela. El inquietante relato de un escritor viejo rodeado de fruta, como él, en avanzada fase de descomposición. El producto de Teletienda que salvó a aquel matrimonio. La fiesta latina que destruyó a aquel otro. El día a día en la oscura vida de un creativo publicitario brillante. El verdadero rostro de la partitura de la canción de aquel anuncio memorable. ¿Te acuerdas? El extraño texto aparecido en la web de un profesor de talleres de escritura creativa. El reaccionario discurso de agradecimiento de un cineasta premiado en la noche de los Goya. Y así hasta veintitrés excelentes cuentos, uno para cada hora del día. O casi.