Nate y su madre han huido de casa: el solo tiene once anos, pero sabe que tienen que escapar, esconderse, esfumarse. Todo ira bien, su madre se lo ha prometido. Se quedaran en una cabana abandonada en medio del bosque, alli estaran a salvo.
Sin embargo, cuando ella sale en busca de provisiones y no regresa, pasados los dias, Nate empieza a preocuparse de veras. ¿Alguien les ha seguido? ¿Quiza estara tambien acechandolo a el?
Justo cuando mas indefenso se siente, aparece su viejo gran amigo, Sam. Tanto tiempo sin verse, y aparece en el instante en que mas lo necesita...