A comer también se aprende. Y, lo mismo que ocurre con otras formasdel saber, puede aprenderse bien o hacerlo de una forma equivocada.Los hábitos alimentarios se establecen en los primeros años de la vida y se mantienen con pocos cambios a lo largo de toda la vida. Por esoes tan importante que esos primeros pasos se den de la mano de quienes conocen bien el mundo de los niños y el mundo de la alimentacióninfantil.Hoy, cuando tan fácil es conseguir información por medio de las nuevas tecnologías, cuando parece tan fácil opinar sobre lo que es buenocomer y lo que no lo es, las mamás y los papás se encuentran con máspreguntas que respuestas.En este pequeño libro práctico sobre alimentación infantil hemosquerido reunir la experiencia de un pediatra con muchos años deejercicio clínico con el saber y el buen hacer del Departamento deDietas de la Clínica de la Universidad de Navarra. Un libro construido sobre las preguntas oídas a lo largo de los años en la consulta o através de la colaboración con los medios de comunicación.Esperamos que sea de vuestro provecho.